En esto del correr nunca vamos solos, siempre llevamos esa vocecita interior con nosotros. En ocasiones grita desesperadamente pidiendo una tregua y otras veces parece que se ponga a cantar harmoniosamente al ritmo de nuestro ejercicio. En definitiva, siempre está ahí ese diálogo interior que nos mantiene entretenidos... ;)
martes, 24 de febrero de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario